Desvaneciéndonos

La manera de encontrarnos cambió, antes éramos un cuerpo y un sitio donde llegábamos para compartirnos de manera presencial, para intercambiar momentos,  vernos las caras, coquetearnos con las manos, y con los ojos,  tomarnos un café, una cerveza y sentir esa sensación en la cabeza de las vueltas que da la vida cuando te pasas de copas, recorrer caminos que solo se recorren y se viven cuando se está allí presente, conocer extraños, probar  experiencias, conocer lugares, caernos y levantarnos, abrazarnos y separarnos, sonreírnos y enojarnos, nuestros cuerpos y nuestros ojos se encontraban en ese sitios casi sagrado donde nos identificábamos como personas, donde nada más importaba, a donde íbamos luego del trabajo, cuando había tiempo, cuando estábamos simplemente desparchados o con ganas de estar. 

Pero el tiempo y la realidad nos fueron atrapando y las personas se fueron desvaneciendo, sus figuras, el color de sus ojos, la forma de sus cabezas, su olor, y hasta   el tono de sus voces, sus muletillas, las pausas  al comenzar una oración, la repetición de las historias, las  tonterías de las conversaciones, el susurro al oído  se fueron desvaneciendo  ahora  son solo un perfil de una página web, ya no los encuentras en ese sitio, ya no encuentras su presencia, todo se redujo a las comunicaciones  a letras escritas y frívolos mensajes.

Mi vida no es solo una pantalla, ni de celular ni de computador, yo no soy un simple perfil de Facebook o Instagram, ni una foto o mensaje de WhatsApp, ni una video llamada de skype, yo soy mucho más que eso, soy una persona, en tres dimensiones, con sentimientos y sensaciones, tengo una vida que no cabe en cuatro bordes de una pantalla como a veces hacen sentir estos mensajes tan impersonales.
Me hace mucha falta la manera como nos encontrábamos antes, mirar a los ojos a alguien al conversar, saludar de beso y abrazo apretado cuando nos encontrábamos, tomar café, sentarnos en un sitio y ver pasar las horas conversando de nimiedades, riéndonos, disfrutando de lo que realmente vale la pena compartir con una persona, no con una pantalla.


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CONVERSATION

3 Comments:

  1. Zero mía, preciosa. Que todo se gasta en este mundo, todo se deteriora y es llegado el momento de largarse con la música a otra parte.
    Que mira que cada año nace una nueva primavera, un brotar de la sangre, un gemido, un deseo.
    Y toda tu vida comenzará a nacer.
    La vida es una búsqueda constante y tu estás en la flor abierta y pronta para encontrar lo que buscas. A por ello, preciosa. A por ello. No te desanimes. Escribes como los ángeles.
    Ánimo.
    Muchos. Muchísimos besos.

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  2. Mejorana bella, siempre animándome con tus inspiradoras palabras, nunca me cansaré de buscar y de encontrar en nuevos horizontes mis nuevos desafíos, y uno aprende que lo que no sirve se tira, lo que molesta se evita, y lo que se va es porque ya no me hace falta, más no deja de doler en el corazón lo que alguna vez estuvo allí para hacerlo latir muy fuerte.

    Gracias por comentarme. Un gran abrazo envolvente en magia y besos de miel

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  3. Es ley de vida el que nos pasen cosas que nos duelen. Lo que importa es aprender a vivir con ellas y tratar con todas nuestras fuerzas de tirar hacia adelante.
    De nada sirve lamentarnos el resto dwe nuestros días.
    Después no vendrán otros.
    Aprovecha los que tienes.
    Un beso grande, Carol.

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