Introducción

Estas “aventuras” como quiero llamarlas no tienen un orden cronológico ni de ningún tipo para que nadie se sienta identificado, son historias y personajes al azar que relatan vivencias íntimas y personales que pudieron pasarme a mí, a usted o a las diferentes personas que hacen parte de los círculos en los que me muevo, o simplemente son creaciones de mi infinita imaginación y pretensiones que se me han ocurrido en cualquier momento en cualquier lugar motivada por mis impulsos, pues hay ocasiones que solo se quedan allí en deseos. Las llamo aventuras porque han sido experiencias arriesgadas con eventos inesperados ya sea por tareas asignadas, o por voluntad propia, encuentros planeados o espontáneos con personajes valiosos, situaciones impactantes, o simplemente los caminos de la vida por los que por elección tomamos para lograr metas importantes, un riesgoso proyecto, o simplemente por capricho y desafío. Necesitamos de las aventuras sin saberlo tal vez para estimularnos a nosotros mismos, a los que nos rodean y por mantener un fuego vivo en nuestras aburridas vidas (aunque nos cueste admitirlo), nos puede traer o no beneficios dependiendo de nuestra actitud y del desenlace de dicha aventura, para algunas personas, la aventura se vuelve un factor muy importante en sus vidas, no pueden vivir sin ellas y constantemente se están metiendo en ellas.

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